Uno de los mayores desafíos en la aplicación de terapia compresiva es lograr la adherencia del paciente. Aquí algunos trucos que te ayudaran a logarlo de forma práctica.
¿Qué es la Terapia Compresiva?
La terapia compresiva, es el tratamiento recomendado para el tratar las úlceras venosas o heridas en pierna en pacientes con Insuficiencia Venosa Crónica (IVC).
Implica el uso de vendajes de compresión multicomponentes1 para aplicar compresión terapéutica (40 o 20 mmHg) para mejorar el retorno venoso y de esta forma acelerar el proceso de cicatrización de la herida.
Importancia de la Adherencia en la Terapia Compresiva
La adherencia al tratamiento es crucial para maximizar los beneficios de la terapia compresiva. La falta de adherencia puede resultar en la progresión de la enfermedad, mayor incomodidad y complicaciones adicionales. Motivar a los pacientes para que sigan las recomendaciones médicas es fundamental para lograr resultados positivos.
Estrategias para Mejorar la Adherencia
1. Informar y educar al paciente
2. Correcta técnica de aplicación
3. Manejo del dolor y la incomodidad
4. Seguimiento regular
5. Feedback positivo y refuerzo
Trucos Para Mejorar la Adherencia de tu Paciente
Antes de la aplicación del vendaje
- Explicar la patología y su tratamiento al paciente de forma sencilla.
- Escuchar la experiencia previa del paciente, sus dudas y temores.
- Siempre que sea posible involucrar familia o redes de apoyo.
- Escoger un sistema compresivo multicomponente que de adapte a las necesidades del paciente, un sistema como URGOK2 o URGOK1 2
- Para aplicar el vendaje solicitar al paciente que acuda con ropa holgada y calzado cómodo.
Durante la aplicación del vendaje
- Lavar y secar la pierna antes de aplicar el vendaje.
- Hidratar con Corpitol para disminuir la sensación de picor.
- Identificar las zonas que puedan requerir almohadillado o alguna técnica para homogeneizar la forma de la pierna.
- Reducir, si es necesario, la tensión del vendaje en las primeras aplicaciones.
Después de la aplicación del vendaje
- Indicar los síntomas o molestias comunes (presión, picor, aumento de exudado) y cómo se podrían aliviar estos síntomas.
- Señalar cambios que observará y que demuestran una evolución favorable: reducción del edema y del tamaño de la herida; mejoría del aspecto de la piel.
- Advertir sobre señales de alerta y motivo de consulta (dolor constante, frialdad excesiva, coloración azulada o hinchazón de los dedos de los pies).
Conclusión
La adherencia a la terapia compresiva es esencial para obtener resultados óptimos en el tratamiento de úlceras venosas.
Mediante la implementación de estrategias como la educación, el entrenamiento en la aplicación, el uso de tecnologías de apoyo y el seguimiento regular, los profesionales de la salud pueden ayudar a mejorar la adherencia del paciente.
En última instancia, un enfoque comprensivo y personalizado es clave para superar las barreras y asegurar que los pacientes se beneficien plenamente de la terapia compresiva.
Al abordar las barreras y proporcionar las herramientas y recursos necesarios, podemos mejorar significativamente la experiencia y los resultados de los pacientes.