Úlceras de pie diabético

Las úlceras de pie diabético son una de las principales complicaciones de la diabetes. Entre el 15 y el 25% de las personas con diabetes desarrollarán una úlcera de pie diabético en algún momento de sus vidas. A menudo subestimadas, o incluso no reconocidas por los pacientes afectados, puede provocar complicaciones tales como una infección que requiera hospitalización, o incluso en los peores casos, la amputación. Tras la amputación, la esperanza de vida del paciente no supera los 5 años en casi el 70 % de los casos, un tiempo inferior al de algunos tipos de cáncer. Sin embargo, este resultado no es sinónimo de muerte. Con una prevención adecuada, es posible evitar las úlceras.

¿Qué provoca las úlceras de pie diabético? 

Soin Plaie du pied diabétique

 

La diabetes no solo provoca un desequilibrio de la glucosa en sangre. También provoca dos fenómenos que aumentan el riesgo de que se produzca una úlcera de pie diabético:

  • Afectación de los nervios distales, especialmente con pérdida de sensibilidad. Como resultado, los pacientes no son conscientes de la presencia de heridas o lesiones con lo cual aumenta el riesgo de complicación e infección (úlcera neuropática).
  • Afectación vascular, que provoca la llegada insuficiente del aporte sanguíneo a la lesión (úlcera isquémica).
  • Además, podemos encontrar paciente con una afectación tanto a nivel vascular con neurológica dificultando el pronóstico de las lesiones. (úlceras neuroisquémicas)

En tres de cada cuatro casos, las úlceras de pie diabético están relacionadas con el uso de calzado incómodo, una lesión provocada a la hora de cortar las uñas de los pies, una quemadura/fricción o a fisuras/grietas en las plantas de los pies.

Cuanto más tiempo permanezca abierta una úlcera, mayor será el riesgo de infección. Esto puede llegar a provocar la amputación en casos extremos.

¿Qué es una úlcera de pie diabético?

Plaie du diabétique définition

Son lesiones que aparecen en los pies como consecuencia del déficit neurológico y/o vascular de los pacientes, suelen aparecer como pequeñas lesiones provocadas por un simple corte o por una rozadura debido al uso de calzado inadecuado,

Las úlceras de pie diabético pueden ser de tres tipos:

  • Úlcera neuropática. Estas lesiones se asocian a una perdida de la sensibilidad profunda y superficial. Puede presentarse con compromiso sensitivo, motor y/o autonómico. La ausencia de dolor conduce a traumas y microtraumas que no son vistos y por esto se produce la ulceración.
  • Úlcera isquémica. Se trata de una úlcera relacionada con un déficit de perfusión sanguínea como consecuencia de una enfermedad vascular periférica. Aparece principalmente en zonas distales como en las puntas de los dedos, en el talón o en el borde del pie. Son lesiones muy dolorosas que normalmente presentan fondos esfacelados o necróticos.
  • Úlcera neuroisquémica. Está relacionada a la vez con una neuropatía y una enfermedad vascular periférica. A día de hoy son las lesiones con mayor prevalencia. Estas lesiones comparten características tanto con las úlceras neuropáticas como isquémicas. 

Prevención de las úlceras de pie diabético

El 80% de las úlceras de pie diabético se puede prevenir. La clave para ello incluye un examen periódico del pie a todo diabético al menos 1 vez al año, educación del paciente en autocuidado, para que logre identificar precozmente la aparición de lesiones evitando mayores complicaciones, un zapato adecuado y un buen control metabólico.

Por ello es importante establecer el grado de Pie de riesgo. Esto se realiza mediante pruebas no invasivas de forma rápida llevadas a cabo por personal entrenado.

Los criterios a utilizar son muy sencillos: si existe o no afectación de la sensibilidad, si existe o no afectación de la vascularización, si se observan deformidades o prominencias óseas en los pies, antecedentes de ulceración o amputación, e incluso si existe úlcera activa en el momento de la consulta. 

Esta clasificación de riesgo del Pie Diabético nos dará intervalos de tiempo en los que deberemos acudir al podólogo para realizar un corte adecuado de las uñas, o cada cuanto tiempo deberemos revisar las pruebas realizadas en nuestra Unidad de Pie Diabético de referencia.

Gracias a esta visita médica obtendremos consejos útiles sobre cómo revisar los pies de forma diaria, cómo mantenerlos hidratados o qué características buscar en un calzado para que sea el que mejor se adapte a cada pie.

Si somos capaces de evitar la aparición de una úlcera o detectarla en el menor tiempo posible lograremos minimizar las complicaciones del Pie Diabético.

Tratamiento

En primer lugar, las úlceras de pie diabético exigen un tratamiento rápido y exhaustivo para minimizar el riesgo de complicaciones. Independientemente de su tamaño, la úlcera debe estar controlada en todo momento por un equipo multidisciplinar. El equipo incluye un especialista en diabetes, el médico de cabecera, la enfermera, un podólogo y un cirujano, quienes controlarán en todo momento el avance más o menos rápido de la úlcera.

Utilizar un dispositivo para aliviar la presión también es imprescindible. Con el objetivo de que el pie no ejerza presión sobre la úlcera o las zonas con alto riesgo de ulceración y, al caminar, se distribuya la presión de forma más efectiva con el fin de no agravar la herida.

El tratamiento local puede ser decisivo a la hora de optimizar la cicatrización de las lesiones, pero antes de tratar la lesión debemos de conocer a nuestro paciente y sobre todo las comorbilidades asociadas a la patología.

No vamos a tratar de la misma manera a un paciente isquémico que en un paciente neuropático o neuroisquémico.

Es muy importante conocer la fisiopatología de las heridas de Pie Diabético ya que hay factores muy importantes que pueden hacer que las heridas no evolucionen como es el caso del exceso de niveles de metaloproteasas.

El desbridamiento de los tejidos desvitalizados y de la hiperqueratosis serán cruciales para asegurar también un buen proceso de cicatrización.

¿Y depués?

El 70 % de las úlceras de pie diabético curadas vuelven a parecer en el plazo de 5 años.5 Por lo tanto, los pacientes diabéticos deben tener especial cuidado para evitar recidivas y nuevas ulceraciones, por ello, han de seguir algunas recomendaciones básicas:

  • Llevar zapatos aptos para la forma de su pie y siempre con calcetines.
  • No caminar descalzo.
  • Acudir a un podólogo con regularidad.
  • Controlar diariamente el estado general del pie (utilizar un espejo para inspeccionar la planta).
  • Controlar en todo momento los niveles de glucosa en sangre y seguir una dieta que minimice la diabetes.
  • Acudir a un podólogo para que examine los pies y las uñas (cortar/limar) y no utilizar productos para la retirada de callosidades.
  • Lavar los pies diariamente con jabón y agua, sin olvidarse de secar bien entre los dedos de los pies y utilizar una hidratante para mantenerlos suaves.
  • Evitar calentar los pies utilizando una fuente de calor (p. ej., una bolsa de agua caliente).
Referencias:
1. Setacci C, de Donato G, Setacci F, Chisci E. Diabetic patients: epidemiology and global impact. J Cardiovasc Surg (Torino). 2009 Jul, 50(3) : 263-73
2. Walsh JW, Hoffstad OJ, Sullivan MO, Margolis DJ. Association of diabetic foot ulcer and death in a population-based cohort from the United Kingdom. Diabet Med 2016; 33:1493–98.
3. Whiting, D. R., Guariguata, L., Weil, C., and Shaw, J. 2011. “IDF Diabetes Atlas: Global Estimates of the Prevalence of Diabetes for 2011 and 2030.” Diabetes Res. Clin. Pract. 94 (3): 311-21.
4. Évaluation des actes réalisés par le pédicure-podologue pour la prévention des lésions des pieds à risque de grade 1 chez le patient diabétique. 2018. Haute Autorité de Santé
5. Connor H, Mahdi OZ. Repetitive ulceration in neuropathic patients. Diabetes Metab Res Rev. 2004 ;20 Suppl 1:S23-8